PayPal / Kreditkarte

Banküberweisung

(this is a demo site)

Bank Account Holder Name - This should be your name.
Your Bank Account Number - This is the number of your bank account.
Bank City - The City where your bank is located.
Bank Full Name - The full name of your bank.

¡Se fomenta la industrialización de la cría de animales!

En muchos países, las tradiciones ancestrales, las culturas y la independencia de los campesinos, que siempre han proporcionado alimentos esenciales para las poblaciones locales, se sacrifican a una sociedad cada vez más mercantil. Este cambio radical es políticamente intencional y está respaldado por instrumentos fiscales y subsidios diseñados para acelerarlo. Este cambio está transformando fundamentalmente la vida de muchas personas y la infraestructura de los países comprometidos. Estos países están experimentando una aceleración preocupante del éxodo rural, un aumento significativo de los servicios en relación con la producción, la concentración progresiva de esta y del comercio, así como la disminución asociada de los pequeños agricultores y la extensión de la ganadería intensiva. La sociedad cada vez más tecnológica y comercializada promueve la agricultura industrial que no tiene en cuenta las necesidades de sus animales y contamina el medio ambiente. Nunca antes ha habido tantos animales de granja explotados en la Tierra como hoy. La mayoría de ellos viven en condiciones extremas en países industrializados. ¡Solo en la Unión Europea, alrededor de 400 millones de animales destinados al consumo se mantienen en cautiverio en todo momento, sin contar las innumerables aves y los peces [*]! Estos animales contados son principalmente cerdos, seguidos de ganado vacuno, ovino y caprino. La mayoría de estos cerdos son entregados a una industria intensiva extremadamente brutal, hasta que una muerte violenta termina con su sufrimiento.


La causa principal del rápido aumento en el abuso de estos animales y el número de granjas intensivas es el apetito desenfrenado del consumidor por alimentos de origen animal. Si bien durante siglos, la carne, el jamón, las salchichas y el pescado solo se servían en ciertas ocasiones, hoy en día estos alimentos se consumen a veces a diario en muchos hogares con ingresos suficientes. La anonimización de los animales destinados al consumo, encerradaos a perpetuidad en fábricas de producción intensiva lejos de los ojos de los consumidores, es en parte responsable de este cambio radical en la dieta de muchas personas. El anonimato del ganado facilita su instrumentalización para fines puramente comerciales, lo que contrasta completamente con su uso anterior centrado en una alimentación diversificada. Antes, la matanza de animales de granja, todos conocidos por sus dueños debido al contacto directo y frecuente, no era una rutina de producción como lo es hoy, sino un evento especial y social a menudo relacionado con fiestas religiosas y legitimadas por ellos.
Además de la frecuencia actual de consumo de alimentos que implican la muerte de animales de granja, sus cantidades consumidas por cabeza y por comida también han aumentado considerablemente, según el modelo estadounidense. El consumo de productos elaborados con leche de vaca y de huevos de gallina también está creciendo rápidamente, especialmente porque estos alimentos se incluyen en cada vez más platos y bebidas. La explosión mundial en la demanda de alimentos de bajo costo de origen animal, ha llevado al establecimiento de muchas granjas industriales problemáticas en varios lugares, mientras que las pequeñas granjas tradicionales están desapareciendo poco a poco.

¡Miles de millones de animales de granja son entregados a una tecnología brutal!

En los países industrializados ricos, la cría, el engorde, el transporte y la matanza de animales destinados al consumo, generalmente están ocultos a los ojos de los consumidores. Porque las rutinas diarias de la explotación intensiva de ganado, marcadas por excrementos malolientes, las muertes y lesiones de animales, serían insoportables para las mentes sensibles. ¡Las imágenes de animales de granja encerrados y a veces inmovilizados en espacios mínimos que ímpiden la mayor parte de su comportamiento natural, desanimarían muchos consumidores y pondrían en peligro los beneficios habituales! Las preguntas relacionadas con la agricultura intensiva generalmente son ignorados por los agricultores responsables y rara vez se aclaran públicamente. Por otro lado, se lanzan regularmente campañas de imágenes elaboradas y anuncios engañosos que utilizan bellas fotos que muestran animales de granja en entornos naturales intactos para desviar la atención de los consumidores del bloqueo de información que domina su explotación intensiva. Por lo tanto, los criadores involucrados pueden continuar simplemente ignorando los instintos y las necesidades vitales de los animales vulnerables, sensibles e inteligentes, que están completamente a su merced.
El objetivo de este sistema, totalmente enfocado en las ganancias generadas por la explotación máxima de los animales, es obtener el mayor número posible de productos para la venta, con el mínimo costo de alimentos, de energía, de espacios y cuidados. Esto requiere la automatización de los procedimientos de cría para reducir los costos de tiempo de trabajo, que son muy altos en los países desarrollados, para restringir los movimientos de animales que implicarían costos adicionales en calorías y espacio, para comprar alimentos baratos, a menudo importados, para los animales, y para minimizar la atención veterinaria. Para aumentar las ganancias, muchas castraciones de ganado son realizadas por personas insuficientemente capacitadas y sin anestesia. El ganado vacuno y los cerdos a menudo se sujetan en marcos de acero estrechos para evitar lesiones a los animales superpoblados, por lo tanto estresados y a veces agresivos, y para reducir la carga de trabajo relacionada con su nutrición y la evacuación de excrementos y cadáveres.


Para evitar heridas en los animales de granja, causadas por demasiado estrés y la falta de espacio necesario para evitar conflictos de forma natural, a menudo se les inflige mutilaciones. Les arrancan dientes y amputan las colas de muchos cerdos, cortan los cuernos del ganado y los picos de muchas aves de corral.
Como cada día de vida de cada animal de granja genera costos adicionales, algunos criadores administran activadores de crecimiento a sus animales para reducir el tiempo necesario hasta poder matarlos. Incluso sin esa aceleración farmacéutica de sus vidas, pocos animales de granja lleguan a su primer año. La mayoría de ellos son brutalmente eliminados cuando aún son jóvenes. Ni siquiera se les concede el derecho de alcanzar la edad adulta o de morir sin mucho estrés y sin violencia innecesaria.
Los métodos por los cuales los animales salvajes destinados al consumo, como varios animales de caza, peces, ranas, crustáceos, caracoles y otros moluscos, son atrapados en la naturaleza y matados, en la mayoría de los casos también están ocultos de los consumidores. Esto no es una coincidencia, ya que también implican dramas innecesarios y poco apetitosos.

¡El apetito por alimentos de origen animal conduce a un callejón sin salida!

LIFE UNION denuncia la agricultura industrial que causa sufrimientos a los animales y amenaza el medio ambiente solo por la gula de consumidores egoístas. Estrictamente hablando, solo los alimentos cuya producción respeta las necesidades de los animales afectados, así como el entorno natural y social, son éticamente aceptables, saludables, sostenibles y sin mayores problemas hasta nueva orden. Para poder producir tales alimentos a partir de animales de granja, se deben cumplir varias condiciones: debe haber suficiente agua y suficientes terrenos para cultivos forrajeros y el reciclaje de los excrementos de los animales, pastos, refugios apropiados y espacios que permiten a los animales expresar todos sus comportamientos esenciales. Con el rápido crecimiento demografico, los espacios necesarios para una cria de animales impecable, plantean un problema cada vez mayor y se convierten en un factor limitante de primer orden para cualquier cria al aire libre. En el hemisferio sur, la cría de ganado en campo es una de las principales causas de la tala y quema de los bosques tropicales, el agotamiento de su biodiversidad excepcional y la degradación ambiental a pesar de un cierto respeto por las necesidades de los animales de granja.
En unas pocas décadas a más tardar, la cría al aire libre habrá alcanzado los límites impuestos por el espacio disponible. Aunque la agricultura industrial requiere espacios mucho más pequeños, no es sostenible debido a sus múltiples problemas y, por lo tanto, inaceptable. Como resultado, la producción mundial de alimentos a partir de animales de granja deberá estabilizarse lo antes posible a un nivel sostenible a largo plazo. Su limitación se impone no solo por la falta de espacio disponible, sino también por los graves riesgos de escasez de agua, lo que ocurriría al aumentar demasiado el número de animales de granja. Según un estudio reciente, la producción de un kilo de carne de res consume más de 15,000 litros de agua, la mantequilla todavia más de 5,500 y los huevos aún requieren 3,200 litros de agua por kilo producido, mientras que los cereales consumen un poco más de 1600 y las verduras menos de 350 litros por kg [ ** ].


Además, no debemos descuidar la contaminación de la atmósfera con cantidades significativas de gases de efecto invernadero procedentes del ganado, incluidas las emisiones de metano producidas durante la digestión en el ganado.
Las personas deberían reflexionar lo antes posible sobre los crecientes problemas del impacto ambiental de los alimentos producidos por animales de granja. En cualquier caso, una limitación cuantitativa de estos alimentos se impondrá tarde o temprano. Sería completamente lógico y deseable distribuir los alimentos de origen animal producidos de acuerdo con el tratamiento ético de los animales y con la protección del entorno natural y del medio ambiente entre todos los consumidores interesados. El mejor medio para lograr tal distribución equitable de estos alimentos serían cuotas, que tendrían en cuenta el consumo respectivo de tierra, de energía y de agua, así como las emisiones nocivas resultando de tales productos durante su producción y comercialización. El método de elección sería un sistema de comercio internacional para certificados de consumo de todos los alimentos críticos de origen animal en analogía con el comercio internacional de certificados de emisión de gases de efecto invernadero. A diferencia de estos, los certificados de consumo de alimentos de origen animal deberian intercambiarse entre personas y no entre empresas, porque muchas de estas ultimas encuentrarian formas de hacer beneficios financieros a expensas del clima. La adopción de dicho sistema comercial reduciría el consumo de alimentos de origen animal y al mismo tiempo podría compensar financieramente a los veganos, pero también a los vegetarianos y otros pequeños consumidores de dichos productos. De hecho, la responsabilidad de estas personas por el consumo de tierra, agua y energía, así como por otros impactos ambientales relacionados con la producción de alimentos a partir de animales es cero o mucho menor que la de sus principales consumidores. Teniendo en cuenta las muy diferentes cantidades de alimentos de origen animal consumidos en las diversas regiones del mundo, cualquier distribución equitativa de estos conduciría inevitablemente a una gran reducción de su consumo en los países industrializados ricos. Otro efecto beneficioso de dicho sistema para intercambiar certificados de consumo de estos alimentos críticos sería compensar a las personas pobres de todo el mundo por las consecuencias que ellos tienen que sufrir injustamente, debido a la alimentación globalmente insostenible de los consumidores mas adinerados o glotónes.
Otra solución a los crecientes problemas en la producción de alimentos de origen animal sería dejar que los mercados respondan a las inevitables limitaciones de suministro en el futuro. Sin ninguna duda, el desajuste resultante entre la demanda de alimentos de este origen y su disponibilidad conduciría a un fuerte aumento en sus precios. Esto ejercería una presión financiera sobre los grandes consumidores de carne y sus derivados en particular, o los alentaría a reducir su consumo insostenible de estos productos. Las personas con bajo poder adquisitivo estarían aún más en desventaja que hoy en términos de alimentos asequibles de origen animal y tendrían que prescindir cada vez más de la carne, los subproductos y los productos lácteos. Aunque esta solución no está socialmente equilibrada, tiene la ventaja de no requerir una administración adicional y relativamente compleja. Por eso, es mucho más probable que pueda afirmarse en nuestra sociedad injusta basada en el principio económico del mercado.
Una tercera solución al problema de los recursos limitados para el ganado tradicional puede, tarde o temprano, volverse esencial por varias razones e incluso prevalecer durante este siglo, si no se adopta otra solución a tiempo. Sin embargo, es poco probable que sea implementada en el futuro cercano, ya que no solo va en contra de tabúes religiosos, dogmas políticos y grandes intereses económicos, pero que además los cuestiona fundamentalmente y hasta nuevo aviso permanecerá impopular por estas razones. Esta solución tiene como objetivo garantizar la compatibilidad del uso sostenible de los recursos para los humanos con las capacidades limitadas de la biosfera y, en última instancia, conduciría al control de la natalidad para reducir los niveles de consumo insostenible.

¡Una cultura cárnica sostenible basada en carne cultivada!

Ya es hora de establecer una nueva relación respetuosa entre los consumidores de alimentos de origen animal y los animales que la producen y de examinar críticamente la nutrición humana y sus consecuencias.
La carne de ganado es, con mucho, la parte más problemática de la dieta humana, no solo por las enormes cantidades consumidas en el mundo. Otros problemas están relacionados con las condiciones de reproducción brutales que generalmente se infligen a estos vertebrados sensibles desde el nacimiento hasta su muerte prematura. El problema ético de la carne de ganado se ve agravado por los impactos ecológicos causados por el consumo muy alto de recursos limitados y por las emisiones contaminantes. Por estas razones, la producción ganadera no puede extenderse indefinidamente, sino que pronto debería estabilizarse a un nivel sostenible que respete tanto el medio ambiente como la naturaleza y el bienestar animal. Este razonamiento se aplica en principio a todos los productos que involucran la matanza de animales, incluida la carne y otras partes de animales salvajes, así como a todos los productos pesqueros, independientemente de si provienen de especímenes capturados en la naturaleza o de aquaculturas.
Como una demanda estancada de carne y pescado, y mucho menos la abstinencia de tales alimentos, no es realista en el futuro cercano, existe una necesidad urgente de resolver los problemas asociados con estos consumos. Aunque las algas y los insectos tienen un inmenso potencial dietético y están ganando importancia, los consumidores “adictos” de productos cárnicos y pesqueros no seguirán fácilmente la transición a estas fuentes alternativas de alimentos. Por consecuencia, solo una combinación de métodos complementarios de producción de alimentos de origen animal podría satisfacer de manera sostenible el apetito de una población humana, que pronto superará los diez mil millones de personas. Por un lado, la cría de varios animales que los respeta a estos y al medio ambiente de acuerdo con las éticas biocéntrica y ecocéntrica, así como ciertas extracciones juiciosas y sostenibles de la naturaleza, podrían generar varios alimentos naturales de origen animal. Esto satisfará la demanda de los clientes exigentes de alimentos de alta calidad de diferentes carnes, pescados y otros animales a precios respectivamente altos.

Por otro lado, métodos biotecnológicos podrían producir carne, pescado y alimentos derivados de calidad y de bajo costo, asegurando una producción suficiente de proteínas animales, así como una dieta saludable y sostenible para una población humana en rápido crecimiento.
Es por eso que LIFE UNION apunta al mismo tiempo a la transición ecológica y al respeto por los animales de cría, pesca y caza, así como a la producción de carne y pescado a partir de cultivos celulares. Gracias a estos cultivos, sería posible por primera vez la producción a medida de diferentes tipos de carne y pescado de diferentes especies sin sufrimiento animal y sin afectar la naturaleza y el medio ambiente. Tales cultivos celulares indoloros podrían satisfacer la gran demanda de carnes y pescados sabrosos, higiénicos y económicos. En el futuro, máquinas pequeñas de cultivo de células podrían producir filetes, escalopes, jamones, etc. en casa, con las proporciones deseadas de grasa, de fibras musculares y de tejidos conectivos, así como filetes cultivados de pescado de acuerdo con las preferencias personales, sin atormentar y dañar a los animales, a los ecosistemas naturales o al medio ambiente.
LIFE UNION desea acelerar este desarrollo predecible que puede proporcionar a la creciente población humana alimentos suficientes, saludables y sostenibles al mismo tiempo que promueve la protección de los animales, de la naturaleza y del medio ambiente. Para este fin, es esencial la colaboración de científicos dedicados, de técnicos talentosos y aficionados experimentados al bricolaje. Sería urgente encontrarlos y convencerlos de participar en el desarrollo de cultivos celulares de carnes animales para el bien de la humanidad y de la biosfera. De lo contrario, las empresas privadas de biotecnología se arriesgarían a bloquear este avance sin fines de lucro que salva vidas, con sus patentes estratégicas con desastrosas consecuencias sociales y ecológicas.

Gracias a su apoyo, esta cultura culinaria innovadora y altamente civilizada que ofrecerá por primera vez varias carnes y pescados producidos sin sufrimiento y sin problemas ecologicos, pronto podría surgir en colaboración con institutos de investigación de diferentes países. Año tras año, ahorraría innumerables sufrimientos, vidas miserables y sobre todo muertes crueles de miles de millones de animales y protegería además multiples ecosistemas amenazados y el medio ambiente.


Referencias:
[*]: eurostat – Agriculture, forestry and fishery statistics (2014 edition)
[**]: Water Footprint Network